Un completo diagnóstico acerca de la situación de SAMU se realizó este jueves 10 de septiembre en la segunda reunión del grupo de trabajo Fenpruss sobre el Servicio Médico de Urgencias, donde se priorizaron los requerimientos de las y los trabajadores de esta área de atención. Entre los elementos acordados se encuentra definir la pertenencia de SAMU a los Servicios de Salud y cumplir con lo que requiere el manual nacional de atención de urgencias, además de determinar ciertas cosas que se requieren a corto plazo.
La dirigenta nacional Anaí Freire, una de las coordinadoras del grupo, señaló que “las necesidades tienen que ver con lo inmediato, por ejemplo el requerimiento de refuerzos Covid, o lo que se relaciona con la calidad, cambio y mejora de las ambulancias, por nombrar algunas cosas”.
Añadió que lo importante de esta reunión “es que se genera una instancia de mejora, en la que como Fenpruss tenemos oportunidad de reforzar, dinamizar y mejorar la atención de salud pública, donde el SAMU tiene diversas características territoriales de las cuales el Estado tiene que hacerse cargo”. En opinión de la dirigenta, es necesario que el sistema identifique claramente cuál es la función, la importancia y las necesidades que tiene el personal completo de SAMU como centro regulador y de atención pre hospitalaria.
Por su parte Guillermo Henríquez, coordinador del grupo y dirigente nacional, destacó la relevancia de esta valiosa instancia, donde se pueden levantar las necesidades y requerimientos “de todas y todos quienes trabajan en la red de SAMU a lo largo de nuestro país y además definir acciones concretas para mediano, corto y largo plazo, con el objetivo de seguir avanzando en reconocer, resaltar y conseguir mejoras para el área pre hospitalaria. Valoro y rescato el compromiso y alta participación de los compañeros y las compañeras”, manifestó.
Considerando que existen diversas realidades a nivel nacional, el coordinador SAMU Curanilahue Edgardo Gutiérrez declaró que este espacio es una tremenda oportunidad en el sentido que “todos tenemos distintas necesidades y a pesar que hemos ido trabajando en mejorar las problemáticas y disminuir las brechas, nos fuimos dando cuenta que eran transversales. Por eso vemos que a través de la asociación gremial podemos llegar al nivel central e instalar nuestros temas como una prioridad, porque hoy la pandemia dejó en evidencia muchas falencias que existían en distintos niveles, incluso en el SAMU donde también hay carencias y, en ese sentido, crear este grupo de trabajo nos permite canalizar nuestras demandas y problemas”.
El dirigente agregó que las peticiones más urgentes no solo están enfocadas en suplir sus necesidades como profesionales. Aunque se habló de nivelar la situación contractual y el grado de inicio de las y los profesionales, eso es sólo una parte “porque muchas de las problemáticas afectan directamente a nuestros usuarios y usuarias, tal es el caso de la renovación de flota donde no existe una política definida y si pensamos que la atención de los pacientes es lo que nos mueve, es muy grave que tengamos que suspender la atención pre hospitalaria porque no hay ambulancia disponible”. Asimismo, muy pocas bases SAMU cuentan con la infraestructura adecuada, de hecho los y las dirigentes hicieron sentir los problemas que sufren en los lugares de trabajo: “vemos casos donde técnicos y conductores se encuentran en condiciones indignas, en el invierno mojados, inundados, en el verano asfixiados, en espacios reducidos, en subterráneos, en container. Entonces llevamos muchos años de promesas y cambios de administración que olvidan los proyectos anteriores, por eso en el presente nos inquieta que exista un déficit en infraestructura, porque no se han construido instalaciones para SAMU”, indicó el enfermero Edgardo Gutiérrez.
Entre las sentidas necesidades se mencionó también que exista mayor capacitación continua para mantener a los equipos actualizados en relación a las normas que constantemente se están renovando; completar la dotación de recurso humano para disminuir la brecha que habría según las directrices que entrega el manual y que no se están cumpliendo ni supervisando; generar protocolos de intervención y regulación porque los pocos que existen son guías locales, lo que causa disparidad en la atención de las emergencias a lo largo del país; y por último solicitar un trabajo en el largo plazo para la autorización sanitaria de las bases SAMU, así como en una política de acreditación en calidad y seguridad de la atención.
Finalmente, el representante local agradeció la creación de este grupo porque “vemos que es una tremenda oportunidad, un trampolín para visibilizar nuestras necesidades, porque cada uno la hace llegar a su Servicio de Salud pero la respuesta siempre es que no hay presupuesto, y queremos que las autoridades conozcan nuestras problemáticas más ahora con la pandemia, donde la demanda y el trabajo de SAMU se ha incrementado así es que esperamos sensibilizar al nivel central para que se atiendan nuestras demandas”, concluyó.
